Hasta que el día soñado por todos los metaleros y amantes de la música llegó a su fin. Una de las bandas más importantes del metal mundial pisó suelo peruano e hizo que el día de ayer, jueves 26 de marzo, quede grabado por siempre en la memoria de todos los que estuvimos ahí. Eran las 10 a.m. y todos los noticieros, periódicos, radios y diferentes medios de comunicación hablaban de las grandes expectativas del concierto, carpas que habían estado a las afueras del estadio día antes, el Ed Force One aterrizando, las medidas de seguridad, y todo lo demás que se necesitaba saber para el magno evento que se avecinaba.Eran las 6 de la noche y ya estaba tarde para el concierto. Subo al taxi y lo primero que me dice el taxista es “¿vas al concierto ese en el nacional, no? Ya me he hecho cuatro carreras hasta ahí y está repleto de gente. Algunos parecen que nunca salen de sus casas, muy raros”. Pero bueno, eso no es de mucha importancia. Llegue al Estadio Nacional y al ingresar lo primero que veo son miles de manos levantadas en la cancha gritando a más no poder “Maiden, Maiden, Maiden…”. Sin duda se venía un concierto soñado.
Eran un poco menos de las 7 y, como estaba planeado, la banda más emblemática del metal peruano salía reventar el escenario. M.A.S.A.C.R.E., sin duda, estuvo a la altura del espectáculo. Un desenvolvimiento excelente con una muy buena respuesta del público. La nostalgia y fuerza fueron los grandes ingredientes de la presentación de esta banda que después de 20 años ha podido lograr subir al escenario representando a toda la comunidad metalera del Perú. Realmente una gran presentación en donde todos como una misma unidad coreamos los himnos del metal nacional. La sorpresa para todos sin duda fue el aclamado “Loco” Cervantes que finalmente apareció.
Luego, las chelas empezaron a fluir entre la gente mientras Lauren Harris, hija del bajista de Iron Maiden, salía al escenario con una presentación que personalmente me pareció fuera de lugar. Sin embargo, la gente la apoyo y por suerte nadie se le ocurrió decir idioteces como ocurrió en otros países donde no la dejaban cantar. Su espectáculo culminó con un tortazo en la cara al manager que cumplía años y una alegre Lauren que se retiraba para dejar el campo libre para el estallido.
Unos minutos de espera y se apagaron las luces. La gente enloquecía más de lo humanamente posible. Aparecía el video del Ed Force One mientras los gritos se escuchaban a más no poder. En eso, el sueño empezó. Ace High y la cancha se volvía una marea humana mortal. El éxtasis de la gente no podía más. Era normal que empecé al lado derecho del escenario y terminé por el centro llevado por esta marea humana que no paraba. Algunos gritos desesperados diciendo “tranquilos, tranquilos…” se escuchaban sin mayor trascendencia. La gente estaba viviendo el concierto de sus vidas. Era la segunda canción y mi polo, literalmente, estaba completamente mojado, una locura.
Seguía la tanda del mejor metal de mundo y llegaban los primeros “¡Scream for me Limaaa!”. Simplemente, inexplicable la reacción de la gente. Llegaban las esperadas Phantom of the Opera y The Trooper. Bruce corría por todo el escenario flameando la bandera inglesa cual general comandando un ejército de metaleros enloquecidos. Después de esto, llegaba el momento especial de los seguidores peruanos. Una gigantesca bandera fue soltada desde la zona The Trooper para que recorra toda la cancha. Debe haber sido increíble ver ese acto desde arriba.
Llegaba uno de los momentos cumbres del concierto. Powerslaves despertaba a la gente que ya empezaba a mostrar agotada y muchos, con complejos de periodista, se aferraban de sus celulares o cámaras para filmar el concierto (algún día se darán cuenta que mejor es vivir el momento). Se venía la canción que fue cantada desde el alma por todos, Run to the hills realmente increíble. Esta fue seguida de Fear of the dark que simplemente me dejó sin palabras. La gente ya había recobrado energías y las mareas humanes continuaban.El concierto siguió hasta que llego el turno del aclamado Eddie. Iron Maiden y le daban paso al miembro de la banda que aparece en todas las caratulas. El Eddie gigante hacía su parición y empezaba a hacer de las suyas en el escenario. Seguía The number of the beast y el concierto ya iba llegando a su fin.Unos temas más y Bruce anunciaba que en dos años volverán a presentar su próximo disco de estudio y que nosotros seremos los afortunados en abrir la gira. Esperemos que se acuerden. Finalmente, uno a uno se fue acercando al público y las uñas, baquetas, muñequeras, parches y demás accesorios empezaron a volar. La gente gritaba “noo, Maiden no se va, no se va, no se va, Maiden no se va”, pero sí se fueron y el concierto llegó a su fin.
No hay discusión que la presentación fue de primera y no era de esperarse menos de Iron Maiden. Sin embargo, por más esfuerzo y reconocimiento que se le deba dar a la empresa encargada por traerlos, la producción dejó mucho que desear. Los cinco Eddies, la mucha pirotecnia, y el escenario como en los mejores espectáculos del mundo nunca se pudieron ver. A pesar de esto, Iron Maiden estuvo en Lima y dejará marcado el viernes 26 de marzo en la memoria de todos para siempre.
Set List:
Aces High
Wrathchild
2 Minutes to Midnight
Children of the Dammed
Phantom of the Opera
The Trooper
Wasted Years
The Rime of the Ancient Mariner
Powerslave
Run to the Hills
Fear of the Dark
Hallowed by thy Name
Iron Maiden
The Number of the Beast
The Evil That Men Do
Sanctuary
Fuente: http://conciertosperu.com.pe/videos/2009/cronica-y-videos-iron-maiden-estadio-nacional-de-lima-26-de-marzo-2009/
